En el marco de la celebración del centenario, el Gimnasio Moderno le rindió un sentido homenaje a uno de los hombres, que con su visión ayudó a construir las bases de este alcázar de ilusión: don Tomás Rueda Vargas.
La izada de bandera del 24 de febrero, contó con la presencia de los familiares descendientes de don Tomás, entre quienes se destaca su nieto, el Ministro de Trabajo del actual gobierno, doctor Rafael Pardo Rueda, quien como representante de la familia, fue el encargado de izar la bandera de Colombia.
En sus palabras el Señor Rector, Víctor Alberto Gómez Cusnir, destacó el interés y el afán que don Tomás tenía por el conocimiento, virtudes ambas que se vieron reflejados en cada uno de sus actos, sobretodo, cuando fue encargado por don Agustín para poner en orden y establecer los derroteros del Gimnasio en términos financieros y filosóficos, durante los cuatro períodos en los que ejerció como Rector del colegio.
Don Tomás, desde muy joven, se caracterizó por su interés por la naturaleza. Conocía palmo a palmo la Sabana de Bogotá, la cual, para él, era un inmenso taller en donde detrás de cada flor y de cada animal, hay un nombre, una familia o una leyenda, tal como lo menciona Alfonso López Michelsen en el prólogo del libro “La sabana y otros escritos” que editó el instituto Caro y Cuervo y en el cual se compilan algunos de sus mejores textos. Una publicación que pone en evidencia su interés pedagógico y su afinidad con los principios y el espíritu del colegio.
De la mano con este sentido homenaje, los asistentes pudieron apreciar en exclusiva la nueva versión del Himno de los gimnasianos, la cual está basada en arreglos orquestales que el maestro José Eleazar Leal realizó hace algunos años y que no eran conocidos por la comunidad.
El homenaje a don Tomás hace parte de una serie de actividades que el colegio está organizando para rendirle tributo a todas aquellas personas que estuvieron involucradas con la concepción de la idea del Gimnasio Moderno.