El Gimnasio Moderno siempre ha sido una institución liberal, de talante democrático y respetuosa de la constitución y las leyes. La alteración del orden público y las protestas que se han manifestado en todo el país, deben ser materia de análisis juicioso y de una profunda reflexión por parte de toda nuestra comunidad. Hoy, más que nunca, debemos estar unidos para rechazar la violencia y la represión, vengan de donde vengan, como debemos respetar las voces que de manera pacífica reclaman un país más justo y equitativo.
Es momento de hacer un alto en el camino para conversar en familia sobre todo lo que está sucediendo en nuestro país. Nunca antes nuestra nación nos ha necesitado tanto. Estamos convencidos de que, únicamente, a través de diálogo sincero y respetuoso de las diferencias, empático con el dolor de los demás, se podrá encontrar una salida a los angustiosos días que están pasando.
La próxima semana programaremos algunas sesiones y espacios de clase para abordar, desde una perspectiva pedagógica y responsable, las problemáticas sociales que muestran la realidad de nuestro pueblo para que los gimnasianos comprendan la importancia que tiene su preparación para en el futuro servirle a los demás y construir una mejor sociedad que traiga progreso a Colombia.
Por eso convidamos a todas las familias a leer y comentar en sus hogares sobre los sucesos que hemos vivido en los últimos días. Es nuestra responsabilidad formar lectores críticos que puedan comprender el mundo con un criterio propio, capaces de observar, comparar, disentir y respetar la opinión contraria. Abordar los hechos desde diferentes fuentes permitirá que cada uno de nosotros tengamos más perspectivas para la reflexión. Los sucesos están siempre llenos de matices y la lectura de variadas fuentes permitirán que nuestros alumnos identifiquen los suficientes argumentos para fortalecer sus ideas y llegar a consensos y ser mejores ciudadanos.
No es esta la primera vez que el colegio invita a sus estudiantes a reflexionar sobre hechos lamentables que ocurren a su alrededor. En abril de 1948, cuando el colegio fue sede de la IX Conferencia Panamericana, los alumnos, junto a los delegados de diferentes naciones, analizaron el panorama nacional; ellos mismos fueron testigos de la firma de la carta de Bogotá, que dio origen a la OEA en el Edificio del Bachillerato. Una oportunidad única para aprender a llegar a acuerdos con visión de futuro. De los desmanes que ocurrieron durante el Bogotazo, Agustín Nieto Caballero nos dejó su máxima “educar antes que instruir”.
Los colegios, advertía nuestro fundador, debían entregarles a las sociedades personas más críticas y sensibles, conectadas con el país y mucho más responsables. Es en estos momentos de zozobra cuando más debemos izar nuestra bandera para acompañar con esperanza y entusiasmo nuestro compromiso con Colombia.
Feliz fin de semana para todos.
Cordialmente,
Víctor Alberto Gómez Cusnir
Rector