El pasado mes de abril, el Arzobispo de Bogotá, Monseñor Luis José Rueda Aparicio, designó como Capellán del colegio al Padre Edgar Rivera García.
Padre Edgar Rivera García, nuevo Capellán del Gimnasio Moderno.
Orgulloso de ser opita, cuenta, con su gran sonrisa, que llegó al mundo en la ciudad de Neiva, Huila, en el seno de una familia que le enseñó a ir a misa los Domingos a pesar de que ese no era su plan favorito.
Con amor y mucha oración, le ha perdonado a la vida, el haber perdido a su padre, víctima de la violencia, cuando era tan solo un niño. Una muestra de que en su corazón no hay cabida para los resentimientos.
Los niños conociendo al Padre Edgar.
Siendo estudiante tuvo muchos problemas disciplinarios, a pesar de la rigidez militar de su colegio. Las dificultades se le presentaban porque solía desjuciarse mientras el profesor repetía la lección a sus compañeros.
Disfrutó su juventud en pleno. Cuando llegó el momento de decidir su futuro profesional, optó por trasladarse a la ciudad de Manizales para estudiar Derecho de la Universidad de Caldas.
El Padre Edgar acompañando en el altar a su Santidad, el Papa Francisco, cuando vino a Colombia.
Al culminar sus estudios, llegó a Bogotá y la vida le ofreció todo lo que cualquier joven de 20 años añora: Un buen trabajo en la firma Price Waterhouse Coopers, vivienda independiente y un grupo de amigos con quienes los fines de semana, recorría el país repartiendo mercados y ayudando a comunidades desprotegidas; oportunidad, que le permitió ser consciente de la inequidad de la sociedad y de la falta de solidaridad que le sigue haciendo falta a nuestro país.
Cuando se percató que en su vida lo tenía todo, se cuestionó sobre su felicidad y el sentido de su existencia. Al no encontrar respuesta a sus inquietudes, a los 24 años, decidió dejar su estilo de vida para buscar la luz de su corazón, servirle a los demás y apostarle a su vocación de servicio a través de la iglesia católica.
Su formación religiosa en el Seminario Mayor de Bogotá fue brillante. Sus virtudes sociales y educativas salieron a flote cuando tomó la determinación de vestir los hábitos.
Los gimnasianos descubren el espíritu del Padre.
No se equivocó en su decisión de vida. En su trayectoria como sacerdote, creó la Fundación Tierra de Gracia, desde donde desarrolla interesantes proyectos de comunicación con el propósito de impactar positivamente a la sociedad. Entre sus contenidos audiovisuales, vale la pena destacar la serie web: “Encuentros”.
En este enlace podrá ver los capítulos de la primera temporada de la serie web: "Encuentros"
Además de su trabajo difundiendo el mensaje evangélico, actualmente es párroco de la iglesia San Agustín de Hipona, ubicada en Arborizadora Baja, en el Tunal, muy cerca del Gimnasio Sabio Caldas.
El padre Edgar llega al colegio a continuar guiando a los gimnasianos en su formación en la fe, en la consolidación de valores; y a labrar, de la mano con toda la comunidad, el profundo y sano camino de la espiritualidad.
Toda la comunidad celebra su nombramiento y muy pronto podrá asistir asus homilías bajo los cristales de colores de la imponente Capilla de los Santos Apóstoles.
