Cuando se realizaron los primeros planos que mostraban cómo iba a quedar el edificio de La Piscina, hace ya una década, el proyecto contemplaba la demolición del Gimnasio Cubierto para darle paso a una nueva construcción que mantuviera el mismo diseño del moderno edificio.
Pues ese ideal es ahora una realidad. El arquitecto Cristian Bínkele, miembro del comité de profesionales de este ramo que asesora al Colegio, explicó algunas de las características que tendrá el nuevo Centro Deportivo, que no sólo reemplazará al actual Cubierto, sino que se extenderá a la zona de los campos multideportivos del Gimnasio.
Será una edificación que integrará a La Piscina, y que, en cuestiones de imagen y conservación del medio ambiente, será un modelo a seguir, pues estará forrado completamente en vegetación. Además, suplirá parte de su energía eléctrica a través de modernos mecanismos no contaminantes.
En su diseño interior, informa Bínkele, albergará hasta seis espacios independientes para practicar deportes. También, los planos revelan otros espacios que podrían actuar como salones y cafetería, que tendrán acceso a terrazas con vista al campo de fútbol.
El concepto arquitectónico de este mega-proyecto también incluirá modificaciones a las canchas multideportivas y al campo de fútbol.
Las canchas de básquet, microfútbol y tenis, sufrirán una nueva orientación, de manera que el sol no afecte los encuentros deportivos, y además, se dispondrán espacios definidos para que el público se pueda sentar a observar los diferentes encuentros.
En cuanto a la cancha de fútbol del bachillerato, el plan de trabajo incluye, entre otros, de la adecuación de sistemas profesionales de drenaje y un relleno para nivelarla. A sus lados, se construirá una pista sintética de atletismo y sobre su entorno, se cimentarán graderías.
Otra de las consideraciones importantes de esta obra de envergadura, es la de convertir la nueva edificación en el portal de acceso de la calle 76, que comprenderá mayores espacios para los peatones, lugares de encuentro, un parqueadero en el subsuelo con más de 100 plazas y bahías para desembarcar y recoger a los deportistas.
Con este ambicioso proyecto, que comienza a la altura del Palomar y que abarca media mitad del terreno del Colegio, el Gimnasio continúa proyectándose y haciéndole honor a su apellido.
En nuestras próximas ediciones, los lectores irán conociendo avances sobre la obra con la que el Colegio recibirá el inicio de sus próximos cien años.