Entre las ramas del hermoso Urapán, que se encuentra sembrado desde hace más de 60 años en el centro de la zona verde de Montessori, se encuentra ubicada la Casa del Árbol, un lugar que se ha convertido en el mejor espacio para fomentar, desde la infancia, la Disciplina de Confianza.
En 2009 fue inaugurada la Casa del Árbol. Su diseño inicial, en forma de globo, fue propuesto por las ideas de los niños. Contaba con escaleras, ventanas, puertas y un gran tobogán para descender.
Así como los gimnasianos más grandes lo hacen desde sus comités, los más pequeños también tienen un lugar desde donde pueden liderar, gobernar, jugar y estudiar. Es el lugar perfecto para desarrollar la autonomía que caracteriza a los gimnasianos.
En el año 2019, la casa fue remodelada, para darle mayor seguridad a los pequeños. La administración del colegio consultó con un ingeniero forestal, sobre la vitalidad de este gigante de la naturaleza, que ha visto crecer a cientos de gimnasianos. Los técnicos, en sus estudios, demostraron la vigorosidad de este árbol y afirmaron que se encuentra en perfectas condiciones para recibir entre sus ramas, la estructura de esta casa en el aire.